Los pasos de Ignacio Yarur, la cuarta generación de la familia que llega al directorio de Bci
La entidad financiera llevará a cabo este martes su junta de accionistas y deberá ratificar al ejecutivo de 49 años como miembro del directorio, el más joven de la mesa y con más de 20 años en la compañía, siendo uno de los creadores del éxito de MACH.
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Bci citó a su junta de accionistas para este martes 9 de abril y una de las tareas que tendrá es ratificar a Ignacio Yarur como miembro de la mesa directiva.
Esto, porque a principios de diciembre del año pasado, el gerente general de la compañía, Eugenio Von Chrismar, informó que Yarur Arrasate dejó la gerencia de la División de Ecosistema Digital para entrar al directorio que preside su padre, Luis Enrique Yarur.
En este intertanto, Ignacio ha estado participando en varios comités, como el ejecutivo, de finanzas y riesgo corporativo, el de sostenibilidad, y el de personas y cultura.
Con este paso, se selló la entrada de la cuarta generación de la familia Yarur al directorio del banco, que fue fundado hace más de 85 años atrás por su bisabuelo Juan Yarur Lolas junto a otros nueve empresarios de la época, todos inmigrantes.
Ignacio Yarur presentó en diciembre de 2016 al directorio de Bci la idea de lanzar MACH, lo que sería una billetera digital de prepago que hoy se transformó una de las principales palancas de negocios de la compañía con casi 4 millones de usuarios.
Con la ratificación de los accionistas, Ignacio Yarur se convertirá en el director más jovén de Bci, ad portas de cumplir 50 años en el mes siguiente a su entrada a la mesa.
Al interior de la compañía resaltan que será un “tremendo aporte” al gobierno corporativo dada su trayectoria laboral.
El mayor de los hijos del matrimonio Yarur-Arrasate estudió derecho en la Pontificia Universidad Católica de Chile y justo antes del inicio del nuevo milenio, juró como abogado ante la Corte Suprema.
Su primer paso por el mundo legal fue en el estudio Barros & Errázuriz, donde realizó una práctica y con el título en mano, entró a las filas de Carey. Hasta 2002 se desempeñó como integrante del equipo de M&A, donde compartió con el socio de la oficina, Pablo Iacobelli.
Ese año hizo sus maletas y junto a su esposa, Francisca Jünemann -presidenta de la Fundación ChileMujeres-, arribaron a Barcelona para hacer un postgrado. En Cataluña, Ignacio cursó un MBA en el IESE Business School.
Core bancario
Tras finalizar sus estudios, en 2004 se incorporó a Bci, entrando de llenó al negocio bancario. Su ingreso no fue a la primera línea. Tenía que conocer el trasfondo de lo que es un banco y comprender las múltiples dimensiones que tiene el rubro, relató un viejo conocido que destacó los roles que jugó Ignacio.
Parte de su recorrido en el banco fue ser gerente de Banca Privada, gerente corporativo Wholesale, gerente corporativo de Retail, gerente corporativo de Transformación Digital y gerente Corporativo Ecosistema Digital, que fue su último puesto.
Pero entre medio, se radicó por un año en Miami durante 2019 y parte de 2020. En Estados Unidos lideró el proceso de transformación digital de City National Bank of Florida, unidad que ya representa más de un cuarto de las ganancias de Bci.
La pandemia lo llevó a repensar el rol de la banca y consideró la necesidad de acelerar de digitalización para convertirla en una herramienta para promover una mayor bancarización, asunto que ya venía impulsando con MACH desde 2016.
Esto, pues cuando Lionel Olavarría dejó la gerencia general y Eugenio Von Chrismar tomó el timón en 2015, a Ignacio lo llevaron desde el área de retail a la de innovación y transformación digital.
Desde este puesto, armó un equipo de seis personas que se concentraron en una oficina del W para dar vida a MACH tras meses de recorridos en las calles y viajes a Estados Unidos. Ignacio fue en diciembre de 2016 al directorio de Bci para presentar lo que era una billetera digital y en agosto de 2017 se lanzó.
Hoy MACH es prácticamente un banco digital dentro de Bci con casi 4 millones de usuarios.
La empresa familiar
Parte de su tiempo, Ignacio Yarur lo dedica a otros negocios de la familia. Así, uno de sus últimos focos de atención es la Sociedad Nueva Altamira. Por medio de este vehículo, la familia Yarur Arrasate quiere ampliar sus negocios más allá de las actuales estructuras y buscan incursionar en la innovación, tecnología y datos. Dado lo anterior, hoy se encuentra en pleno proceso de análisis de una serie de oportunidades de mercado asociadas a ese mundo, tanto en Chile como en Estados Unidos.
Dentro de sus deberes está la de director de Empresas JY S.A., que agrupa todas las compañías de la familia Yarur que van más allá del negocio financiero, como Ñuble Alimentos, Salcobrand y la rama vitivinñicola Chilean Grape Group.
Lado B
Ignacio también dedica su tiempo a varios temas que lo apasionan: cerrar las brechas educacionales, de género e inclusión femenina y el cuidado del medio ambiente. Por ello, participa en varias fundaciones como Enseña Chile, donde es parte del consejo directivo.
Además es miembro del directorio de la fundación ChileMujeres que preside su esposa, que ha tenido un rol activo en la discusión de políticas de igualdad de derechos y oportunidades laborales de las mujeres en Chile.
Es vecino de Lago Colico, ubicado al sur de la provincia de Cautín en la Región de La Araucanía, donde pasa parte de sus veranos en familia, que incluye tres hijos y en donde se relaja con su padre, quien frecuenta la zona desde los años ‘80, cuando apenas había conexión. Más allá de eso, es director de la Fundación Lago Colico, que ayuda a los emprendedores de la comuna y a promover el desarrollo sostenible.
En su lado más personal, sus amigos relataron que le gusta escuchar música en vinilos y que incluso tiene una colección. Tiene una veta futbolista y es hincha del Club Deportivo Palestino.